El corregimiento de Guaimaral y otras vías de Tubará y Juan de Acosta se encuentran bloqueadas por los habitantes, quienes solicitan a la Gobernación del Atlántico atención inmediata debido a la falta de agua potable. Además, muchos niños y adultos se han enfermado al verse obligados a consumir agua de pozos y estanques.
Otras protestas también se llevan a cabo a través del gremio de transportadores, quienes piden una mejora en el estado de las vías que han causado múltiples accidentes en las últimas semanas. Ambas manifestaciones exigen atención tras varios reclamos que han sido ignorados.
Las temporadas de lluvias también han sido determinantes para estas afectaciones, donde los estanques y pozos han propagado enfermedades como gastroenteritis y dengue. En cuanto a las vías, los deslizamientos y desniveles han generado riesgos para los motociclistas, quienes se han visto obligados a realizar maniobras peligrosas.
Los líderes comunales esperan reunirse con el gobernador Eduardo Verano, quien planea programas para abordar estas problemáticas. Además, solicita a la comunidad calma, asegurando que sus reclamos serán considerados.
Por otro lado, la Triple A, encargada del suministro de agua, anunció que buscará controlar la situación del suministro de agua potable en estos municipios en las próximas horas. Se insta a evitar el consumo de fuentes de agua no potable para prevenir enfermedades.
En cuanto a las vías, se planean acciones de restauración para aquellas que requieren atención, y la ‘Operación Tapahuecos’ continúa de manera exitosa, brindando tranquilidad y seguridad vial a muchos conductores.
