Durante una visita a Cúcuta, Felipe “Pipe” Córdoba presentó una propuesta para reforzar la seguridad en la frontera con Venezuela, combinando presencia policial y tecnología avanzada. El plan contempla el uso de drones artillados, cámaras de vigilancia de alta precisión y patrullas fronterizas operando de forma permanente para contrarrestar el accionar de grupos ilegales.
El dirigente enfatizó que el objetivo es ejercer un control efectivo que disuada a los delincuentes, pero que al mismo tiempo permita que el comercio legal y las actividades económicas de la región sigan fluyendo sin restricciones. “El bandido debe saber que aquí hay firmeza, pero sin frenar el comercio legal que mueve a nuestra gente”, declaró Córdoba, en medio de su recorrido por la capital de Norte de Santander.
Esta iniciativa surge en un contexto de creciente preocupación por la seguridad en el corredor limítrofe, donde las autoridades han reportado constantes amenazas, contrabando y presencia de estructuras criminales. Con la combinación de vigilancia aérea y operativos en tierra, Córdoba plantea un modelo de seguridad que busca blindar la frontera sin aislarla del intercambio comercial y social con el vecino país.
