«Fue como descender sobre otro planeta», describen Osvaldo Ulloa y Rubén Escribano oceanógrafos chilenos lo que encontraron al bajar 8.000 metros de profundidad en esta hendedura frente a las costas de Chile y Perú. Sin duda alguna es una hazaña o un logro que ninguna persona había logrado, y estos chilenos admiraron con sus ojos el famoso “paisaje alienígena” de esta fosa de Atacama.
Ambos chilenos, son director y subdirector del Instituto Milenio de Oceanografía en la Universidad de Concepción, en Chile y se habían resignado a solo estudiar la superficie de la fosa, ya que en 2018 habían realizado una expedición donde encontraron muestras de agua anormales, fotografías curiosas y una serie de extrañas criaturas que alertaron su curiosidad.
En 2019, intentaron una incursión acuática en la zona, pero fue un fracaso, al no quedarse de manos cruzadas y después de estudiar que salió mal descendieron a la fosa y encontraron desde largos silencios hasta una musicalidad acuática, mencionando también que había gusanos arquitectos de ciudades acuáticas para la vía marina, sin duda para 2030 estos oceanógrafos piensan hacer a escala una cartografía del mapa de este fondo marino.
